martes, 13 de agosto de 2013

Tierra y Libertad


Recientemente se han desarrollado desalojos en diferentes zonas rurales del país como los son el de la finca el Aguacate en Liberia donde  más de 300 familias habían  recuperado esa tierra desocupada desde hace años para su sustento. Además, el desalojo que actualmente amenaza la comunidad Indígena de Salitre, donde la policía junto con los terratenientes que reclaman las tierras han llegado a intimidar.

El derecho a una vida digna es innegable a cualquier ser humano, esto deber ser  entendido y respetado por las clases políticas y económicas de este país, quienes utilizan fondos de todos los ciudadanos costarricenses para efectuar violentos desalojos y encarcelamientos de comunidades campesinas que están dando un uso social a tierras ociosas acaparadas por terratenientes o el Estado costarricense.

En Costa Rica el gobierno ha abandonado al pequeño propietario y el campesino arrancado de su tierra, dejando de generar y ejecutar políticas publicadas dirigidas al apoyo de estas poblaciones para el mejoramiento de su calidad de vida.

El modelo económico implementado en el país pone la acumulación de riqueza de las clases más privilegiadas por encima del derecho del pueblo, y pone a su servicio las fuerzas de seguridad oficial del país para imponer sus intereses.

Una Reforma Agraria Integral y un auténtico reconocimiento del derecho de las poblaciones indígenas es urgente en este país, así como en Nuestra Latinoamérica. La participación de la ciudadanía en el gobierno es la única vía para alcanzar la verdadera paz y justicia social.


En este audio se puede escuchar una entrevista de uno de los dirigentes de la recuperación de tierra de la finca El Aguacate después de realizado el reciente desalojo un día antes de la celebración de la anexión de Nicoya a Costa Rica.

El Catatumbo Resiste


Solidaridad con los campesinos y las campesinas del Catatumbo colombiano. Pueblo que ha estado en la lucha por la paz y la justicia social enfrentándose al Estado que solo ha sabido responder con represión armada y fuerzas paramilitares.

Deben detenerse ahora mismo los asesinatos de jóvenes colombianos durante las represiones del gobierno de Colombia. El derecho de los pueblo debe ser cumplido, las Reservas Campesinas exigidas por las personas de esa comunidad deben ser declaradas y apoyadas en todas las formas necesarias para su progreso.

La lucha por la tierra en Colombia y gran parte de Nuestra Latinoamérica es un derecho que le ha sido negado al campesinado, trayendo consigo consecuencias devastadoras para la calidad de vida de estas personas. En el Catatumbo se ha optado por los cultivos ilícitos para poder sobrevivir cuando el gobierno no fomenta los cultivos permitidos, ni compra las cosechas para el consumo de alimentos del interior del país.
Son los jóvenes rebeldes de esta comunidad quienes  encabezan una lucha que es  expresión de la digna rabia, que no podía ser menos,  ante las viles masacres que han sufrido sus familias a manos de los paramilitares y las fuerzas de seguridad del Estado Colombiano.


En el video a continuación se puede conocer un poco más dela situación vivida por el pueblo sublevado del Catatumbo.